El Perrito Cojo

23 Ene 2012

Esta semana os dejamos un cuento para reflexionar, esperamos que os guste.

El dueño de una tienda estaba poniendo en la puerta un cartel que decía: “Cachorros en venta”. Como esa clase de anuncios siempre atrae a los niños, de pronto apareció un pequeño y le preguntó:
—¿Cuál es el precio de los perritos?
El dueño contestó:
—Entre treinta y cincuenta dólares.
El niñito se metió la mano al bolsillo y sacó
unas monedas.

—Sólo tengo $2,37. ¿Puedo verlos?
El hombre sonrió y silbó. De la trastienda salió una perra seguida por cinco perritos, uno de los cuales se quedaba atrás. El niñito inmediatamente señaló al cachorrito rezagado.—¿Qué le pasa a ese perrito? —preguntó. El hombre le explicó que el animalito tenía la cadera defectuosa y cojearía por el resto de su
vida. El niño se emocionó mucho y exclamó:
— ¡Ese es el perrito que yo quiero comprar!
Y el hombre replicó:
—No, tú no vas a comprar ese cachorro. Si realmente lo quieres, yo te lo regalo. El niñito se disgustó y, mirando al hombre a los ojos, le dijo:
—No, no quiero que usted me lo regale. Creo que vale tanto como los otros perritos, y le
pagaré el precio completo. De hecho, le voy a dar mis $2,37 ahora y cincuenta centavos cada
mes, hasta que lo haya pagado todo.
El hombre contestó:
—Hijo, en verdad no querrás comprar ese
perrito. Nunca será capaz de correr, saltar y jugar como los otros. El niñito se agachó y levantó su pantalón para mostrar su pierna izquierda, retorcida e
inutilizada, soportada por un gran aparato de metal. Miró de nuevo al hombre y le dijo:
—Bueno, yo no puedo correr muy bien tampoco, y el perrito necesitará a alguien que lo entienda.
El hombre se mordió el labio y, con los ojos llenos de lágrimas, dijo:
—Hijo, espero que cada uno de estos cachorritos tenga un dueño como tú.